domingo, 31 de octubre de 2010

Gracias por llamar a Tele Terror

(Para miedo, espere en línea y será atendido en breve...)


 

Hoy se celebra Halloween, así que me lanzo con una historia de terror… mental y transparente. ¡Ahí va!

Rrrrrrriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinnnnnnnnnng… Rrrrrrriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinnnnnnnnnng… Rrrrrrriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinnnnnnnnnng… 
¡¡Jo, con el teléfono!!... A ver… 951253…  ¡Bah! ¿Otra vez con la pendejá esta de los cursos de aviación? Llaman todos los días… me tienen loca.  Pues ahí se quedan… no pienso contestarles.

Rrrrrrriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinnnnnnnnnng…Rrrrrrriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinnnnnnnnnng… Rrrrrrriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinnnnnnnnnng…

¡¡Y ahora el móvil!! Ah, no. Po’ eto e’ conmigo…  deja ver… "número oculto" ¿A estas horas? Mmmm… ¡Ay, ñó! A ver si no ha pasado algo en mi casa y me están llamando temprano…

-¿Sí?

-Buenos días, mire… yo le estoy llamando desde Lejos, ¿Usted es quien yo creo que es? –  Pregunta una voz desde el otro lado de la línea.

"¿No será del banco que me están llamando? Como les pedí que me arreglaran el temita este…  No…. A estas horas todavía están cerrado… ¿Quién será?"
-Esteeee, sí, soy yo… dígame.

-Mire, yo soy quien soy y estoy buscando a una persona, que creo que es usted… ¿usted no será la que tenía una oficinita en la Plaza Aquella? –Pregunta

-¿Ein? ¿eh? ¿Quién… yooooo? Mmmm ¿Quién me dijo usted que era? –Pregunté

-Yo soy quien soy Es que estoy tratando de localizar a quien yo creo que es, (interferencias)…. Shhhh – rrrrr-brrrr-ptptpt- En MAX, en la calle GMR –Creo que pregunta.

“¿MAX? En la calle GMR ¿Qué calle era esa? Eso suena a tienda de muebles… Y él dice que es quien es, pero ese nombre no me suena…  mmm… A ver si no van a ser estos de nuevo que me quieren tomar el pelo…  mira que venir a molestar otra vez, después de tanto tiempo… ¡va a ser que no!…”

-¡No, no soy yo! No… yo no soy quien usted cree que soy. No . No soy yo. – Y lo negué de tal manera que hasta me lo creí. Tanto me lo creí que estuve buscando en mi mente un nuevo nombre con el cual asistir el próximo domingo a la pila bautismal más cercana.

- ¡¡YO NO SOY YO!!... Lo siento mucho, pero usted está equivocado… ¡¡YO NO SOY YO!! 
– Le repetí todas las veces que pude.

-Mire, es que yo estoy buscando a una persona que creo que es usted… estuve mirando en Internet y coinciden sus datos… Usted estudió en esta universidad y además es de este pueblo…

-Sí, pero no. Yo no soy yo. Usted está equivocado. Yo lamento no ser yo, pero no puedo ayudarle – Le dije por enésima vez.

¡¡Maldito Graham Bell!! ¿En qué estaría pensando su madre cuando lo parió? ¿Por qué no inventó otra vaina que no fuera el teléfono? Con lo bien que estaba el mundo sin tanto cable y sin tanto satélite…

En este punto de la conversación la sangre ya me corría a millón por las venas. No concebía que después de tanto tiempo, volviera a tener la misma llamada, que tiempo atrás pudo ser una amenaza certera. Las mismas palabras, las mismas preguntas ¿la misma voz?

-¡Anda! qué pena que usted no sea quien yo creo que es… Es que estoy tratando de localizar a una amiga… (interferencias)…. Shhhh – rrrrr-brrrr-ptptpt… y tengo una taza que me trajo de Más Lejos Todavía

Ahí está el error. En el teclado de mi oído, la “C” se escribió como “X” (error tipográfico por la proximidad de las letras… jejé)

-Espérate, espérate, espérate… ¿Cómo me dijiste que te llamabas? –Pregunté

- Yo soy quien soy – Respondió

-Quien eres, ¿pero el que yo conozco de MAC…?

-¡Ese mismo! – Respondió a carcajadas

En ese momento me desplomé en un asiento, aliviada y muy contenta de saber quién era el interlocutor… Como ya no viene el lobo, estoy feliz… ¡Jejé!

- ¡¡Mi’jo!! ¡¡Qué alegría!! ¡¡YO SOY QUIEN SOY!! – Confesé finalmente¡¡Ay, discúlpame por mentirte como una bellaca!!.... ¡Ay, perdóname!!  ¡¡Qué alegría oírte!! ¿Y esta sorpresa tan bonita?

- Mira, es que ella y yo nos propusimos encontrarte. Teníamos días detrás de ti. ¡¡Pero ya te tenemos!! Cuéntame de ti…

-Amigo,  tú no sabes cuántas veces me he preguntado qué sería de tu vida… pues yo también tengo muchísimo tiempo que quería saber de ustedes, pero es que el número que tengo en la agenda me dice que no existe…

Y así se puso al día una vieja amistad. Pensar que por miedo –imaginario o real ¡qué se yo!- pude perder esta valiosa oportunidad de volver a contactar con gente queridísima ¡¡Y ni haberme enterado! Sin mencionar qué historia de terror secundaria me pude haber montado en mi mente colgar el teléfono, si no se hubiesen aclarado las ideas y los propósitos.

-Menos mal que no colgaste, tú sabes que hay gente que cuando no sabe qué hacer ¡cuelga! Y se acabó… -Me dijo.

-No tengo esa costumbre, me parece muy fea. Aunque no quiera escuchar lo que me dice el otro. Por lo menos, por educación, por curiosidad, le dejo terminar su discurso -Aclaré-

-¡¡Esa ha sido la suerte!! Anota ni mail… Me dice

-Anota el mío… y mi blog… - Le digo - Te prometo que en mi próximo viaje a Lejos les iré a visitar ¿vale? Dije finalmente.

-¡Hecho!

¡Qué bueno volver a encontrar a tus viejos y buenos amigos!

Bendito Graham Bell y la madre que lo parió.

¡¡Qué buen invento esto del teléfono!!

  

3 comentarios:

  1. Ah bueno, pero al final acabó bien. Pero al principio daba mucho yeyo...

    salu2, majestad! Me encantó vuestra historia :)

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  2. Está buenísima la historia y yo ser parte protagonista me hace muy feliz...hace muchos años que queríamos encontrarte. No te imaginas la risa que me causó esa conversación... en buen dominicanos te frikiaste!!!!

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  3. MARCHINA:
    ¡¡Muaks, muaks, muaks!! Par de guapos Frikiá y media... pero valió la pena. Un abrazo desde este lado del charco.

    PAYASO PEZ:
    ¿Verdad que da miedo? Jejé...Por eso me reservé la historia para "halogüin"...

    Besos a todos...

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